jueves, 19 de septiembre de 2013

4 empresas que se transformaron con éxito.



En el mundo empresarial, el cambio es constante y los buenos líderes saben cuándo es el momento de modificar la forma de hacer negocios.

Por Linda Lacina
06-28-2013



Los tiempos cambian, la tecnología cambia, los mercados cambian. Para sobrevivir, los mejores líderes saben que sus empresas también deben cambiar. 

Estas compañías han tomado la difícil decisión de alterar la forma en que hacen negocios y comparten lecciones valiosas para todos aquellos emprendedores que tengan que decidir entre alterar o no su rumbo. Toma nota:
1.     Amazon.com
¿Recuerdas cuando Amazon sólo vendía libros? El sitio de retail online abrió su negocio en 1995, durante las primeras épocas de internet. 

A partir de ese entonces, la compañía ha conseguido cambiar la forma en que las personas compran, seduciéndolas de dejar las tiendas físicas para
comprar vía online de todo; desde joyería y muebles hasta artículos de electrónica y ropa, gracias a sus avanzados sistemas de métricas de consumo y una eficiente red que entrega los productos rápido y con precio bajo. 

2.     Nintendo

No sólo los fans de la tecnología y los adolescentes aman los videojuegos. Ésa fue la idea detrás de 
Nintendo Wii, un producto lanzado en 2006 para expandir el gaming hacia los no jugadores. 

Su línea de productos se compone de juegos simples y de una consola accesible. Su control remoto intuitivo imita los movimientos reales de los jugadores y ha atraído a amas de casa, 
adultos mayores y aficionados del ejercicio y de actividades como yoga, boliche y golf. 

La consola contribuyó a un incremento de 228 por ciento en ganancias entre 2006 y 2008, y ha ayudado a la compañía a vender millones de copias. 

3. Xerox

Fabricar copiadoras y máquinas fax no es muy lucrativo en un mundo que cada día se torna más digital. Conscientes de esta realidad, la empresa se transformó de vender equipo para oficinas a manejar procesos de negocios como procesamiento de datos, administración de recursos humanos y servicios de administración de la relación de los clientes para empresas y gobiernos de todo el mundo. 

Este cambio se impulsó con adquisiciones de firmas de procesamiento de datos, como Affiliated Computer Systems en 2010. Los ingresos de la compañía han incrementado en un 50 por ciento desde 2010. 

4.SopaCampbell


Después de estar más de un siglo en el negocio, el fabricante de sopas Campbell se enfrentó a una mayor competencia y a una menor demanda. Necesitaba encontrar una manera de reaccionar más eficiente y estratégicamente en el mercado.

Para hacerlo, desde la década pasada, ha ajustado sus sistemas de TI, cambiando algunos de sus servicios de tecnologías como mantenimiento y desarrollo de sistemas computacionales a proveedores externos y conservando otros en casa, permitiendo que los grupos internos piensen más estratégicamente. Estos cambios, aunados a otros, han reducido los gastos generales de la compañía y han ayudado a controlar sus costos.

jueves, 12 de septiembre de 2013

Emprender en la escuela



Antes de obtener su título, Elizabeth Aguirre prefirió graduarse como empresaria. Hoy busca opciones para replicar su idea de comida saludable.
Por Germán Sánchez Hernández
08-08-2013
Hace menos de una década, la mayoría de los universitarios sólo pensaba en una cosa al terminar la carrera: conseguir un buen trabajo. Ahora cada vez más se suman a una nueva tendencia: ser dueños de su propio negocio. Según un estudio realizado por LinkedIn en EE.UU., el 34% de los emprendedores arranca su primer proyecto entre los 20 y 29 años de edad. La buena noticia es que este fenómeno ya empieza a verse con mayor claridad en México.

Con sólo 21 años y cursando la carrera de Creación y Desarrollo de Empresas, Elizabeth Aguirre Moreno Valle decidió combinar sus clases y tareas con la pasión de su vida: hacer negocios. Así surgió Fast Fruit Factory, un concepto de islas comerciales de comida saludable dirigido a estudiantes universitarios. “Se trata de un servicio personalizado y con un menú flexible de jugos, ensaladas, chapatas, sándwiches y snacks, ideal para comer mientras continúas haciendo la tarea. También contamos con servicio de nutriólogo”, explica.

La primera sucursal se ubicó en el Tec de Monterrey Campus Puebla, el alma máter de “Liza”, como la llaman sus amigos. Fue tan buena la aceptación, que pronto abrió sucursales (de las que tuvo que cerrar dos). Actualmente, tiene tres unidades en operación y un centro de producción que las abastece.

El aprendizaje adquirido en la operación del negocio le sirvió no sólo para mejorar puntos clave de su modelo. También conquistó el segundo lugar del Premio al Estudiante Emprendedor 2012 organizado por la Entrepreneurs’ Organization (EO) y con ello calificó al certamen Global Entrepreneur Awards realizado en la Bolsa de Valores de Nueva York, EE.UU., donde obtuvo el Premio al Impacto Social.

Si bien para un estudiante emprendedor es difícil combinar los tiempos del negocio con los de la escuela, una vez que detecta una oportunidad ya no piensa en emplearse. “Está tan metido en su idea, que no ve otras opciones”, asegura Carlos Camacho, organizador del Premio al Estudiante Emprendedor en México y fundador de la empresa Ecoshell.

El concepto de Fast Fruit Factory surgió como una necesidad personal. “Me gusta comer sano y cuidar mi alimentación, pero en la universidad no había una opción de este tipo. Después, hice un sondeo entre mis compañeros y descubrí que realmente hacían falta alternativas saludables”, cuenta Elizabeth.

Esto coincidió con la apertura de espacios comerciales en una de las áreas de comida de su campus. “Nos asociamos cuatro compañeros de clase para presentar un proyecto que resolviera esta necesidad ante las autoridades universitarias y ganamos la licitación frente a marcas ya posicionadas”, explica la emprendedora. Sin embargo, a la hora de ejecutar la idea, los socios decidieron no continuar y Liza se quedó sola. Y su familia no le veía mucho potencial a su negocio.
Emprendedora multifunción
Pese a este panorama, abrió la primera sucursal. “Tuve que jugar todos los papeles, hasta de diseñadora y arquitecta. Es parte de ser emprendedor. Pero desde el principio tuve claro que no quería un changarrito, sino un concepto profesional y replicable que pudiera llevar a otras universidades”, señala. A lo que Camacho agrega: “alguien que es empleado espera a que su jefe encuentre la solución. El emprendedor está solo, por lo que él mismo busca alternativas. Y aunque es normal que cometa errores en el camino, también es posible que consiga detonar su crecimiento muy rápido”.

Emocionada por el éxito obtenido desde el arranque, Liza se animó a replicar su modelo en otras universidades de Puebla. “Abarcar mercados sin un estudio previo fue la razón que me hizo cerrar un par de unidades. Además, aún me encontraba estudiando y eso no me permitió controlar ciertas cosas; por ejemplo, dirigir un equipo integrado por 18 empleados”, señala la joven empresaria. Pero si bien no contaba con experiencia en negocios, tampoco se puede saber cuándo estás listo para emprender. Así que ella apostó por aprovechar la oportunidad.

Concursar por el Premio al Estudiante Emprendedor fue clave para que Liza se enfocara en mejorar los puntos débiles de su concepto. La primera vez que participó no tenía la idea clara, ni operaba bien; el segundo año aún le faltaba reforzar ciertos elementos; en la tercera ocasión se notó el cambio: renovó su imagen y definió su target específico. “Uno de los pilares a evaluar en el premio tanto a nivel nacional como global es el emprendedor, quien debe de tener capacidad y cualidades para ejecutar su idea. También debe transmitir la pasión por su negocio a su equipo”, explica Camacho.

Como cuenta la emprendedora, en el evento en Nueva York había concursantes de todas partes del mundo, con proyectos muy innovadores. “Y pensé: ¿qué hago aquí con mis jugos si los demás tienen proyectos brillantes?”, recuerda. “Finalmente, aprendí que no basta con tener una buena idea, hay que definir tu modelo de negocio completo, saberlo vender, compartir tu visión y, sobre todo, ofrecer una solución que ayude a la sociedad. En mi caso, a través de comida saludable para jóvenes universitarios”.

Hoy, Fast Fruit Factory cuenta con una imagen profesional y una estructura de negocios cada vez más sólida, sustentada en un modelo financiero bajo control, manuales de procesos y recetas, sistema de manejo de inventarios, capacitación de sus 13 empleados, contratos con proveedores y un centro de producción de alimentos. En esta nueva etapa, Elizabeth analiza la posibilidad de franquiciar su concepto o crecer bajo otro esquema. Y mientras tanto “curso una maestría, trabajo en la incubadora de mi universidad para apoyar a otros emprendedores y planeopublicar un libro”.


miércoles, 11 de septiembre de 2013

3 HABILIDADES QUE UN EMPRENDEDOR DEBE CUITIVAR.

Seth Godin dice que todo emprendedor debe aprender a superar sus temores, pensar como artista y generar conexiones con su público.
Por Bryan Elliot

09-09-2013




Si eres un emprendedor debes moverte de prisa. No trabajas a horas normales, todos los días los inviertes en el negocio y haces todo lo posible para que tu proyecto funcione. Debes saber cómo trabajar duro, pero también hay otras habilidades que los grandes emprendedores necesitan tener. En su libro “The Icarus Deception”,  el gurú del marketing Seth Godin comparte tres habilidades esenciales para los dueños de negocios:

1. Silencia tu Cerebro de lagartija.
Lo sepas o no, todos tenemos lo que Godin llama Cerebro lagartija. Él dice: “La lagartija es la parte física de tu cerebro, la masa prehistórica llamada amígdala cercana al tallo cerebral que es responsable del miedo, la ira y el impulso reproductivo”.

Godin ha escrito mucho sobre esto en sus libros y cita al autor Steven Pressfield para entregar una mejor descripción: “Como Pressfield lo describe, el cerebro de lagartija es la resistencia. La resistencia es la voz detrás de nuestra cabeza que nos dice que retrocedamos, seamos cuidadosos y lentos.  La resistencia crece conforme nos acercamos al lanzamiento, a una perspectiva o a la verdad de lo que realmente queremos. Eso es porque la lagartija odia el cambio, los logros y el riesgo”, dice Godin en The Icarus Deception.

Silenciar al cerebro de lagartija es una batalla constante para los emprendedores y es una habilidad que necesita ser desarrollada. Conforme más escuchamos la frecuencia de lo que se siente correcto y más silenciamos al cerebro de lagartija, más podremos probar nuestros planes de negocios e hipótesis.

2. Piensa como un artista

La mayoría de nosotros nos ponemos en una de estas tres categorías: ser el chef, el cocinero o el lavaloza. Los chefs dirigen el show, contratan y despiden, hacen grandes planes y toman decisiones; tienen el poder. Los cocineros son los ejecutantes; hacen el trabajo. Y los lavalozas con quienes están tras las trincheras haciendo el trabajo sucio. Y eres una de estas figuras en cada momento del día. Pero Godin rompe esta idea.

En The Icarus Deception, Godin nos reta a pensar más allá de la regla y a convertirnos en artistas. “No es arte a menos de que el mundo (o al menos una pequeña porción de él) se transforme de alguna forma. Y no es arte si no es generoso. Y sobre todo, no es arte si no hay riesgo. El riesgo no es el riesgo de la ruina financiera -aunque sea parte de ello. No, el riesgo es el riesgo de ser rechazados. El arte requiere que al artista le importe lo suficiente como para hacerlo cuando sabe que podría no funcionar”.

Pensar como un artista en lugar de como chefs, cocineros o lavalozas abre un mundo entero de posibilidades de cambio, progreso y éxito.

3. Conecta lo desconectado

Conectar gente podría sonar como los eventos de networking tradicionales donde todos intercambian tarjetas de presentación. Godin escribe sobre “la Economía Conectada” y explica que la época en la que nos preocupábamos por dirigirnos a las masas ha pasado. Se trata de conectar a las personas que están desconectadas –así, la conexión se convierte en una función del arte. La oportunidad en la Economía Conectada está en encontrar el problema (donde las personas están desconectadas).

Ésta es una habilidad esencial que podría requerir un esfuerzo significativo. Dice: “¿Cuánta conexión generaste? Ésa es una forma de medir si tu trabajo hizo o no una diferencia. Es cuando haces un comentario atrevido en una reunión, cuando produces un video o una idea que se esparce, cuando más personas visitan tu stand porque no se cansan de ti… Aburrido y seguro pocas veces llevan a la conexión. La conexión ocurre cuando la humildad se reafirma a sí misma”.

martes, 10 de septiembre de 2013

5 ingredientes del espíritu emprendedor

Estas características -

personificadas por figuras como Richard Branson y Mary Kay- son las que diferencian a los empresarios exitosos.

Por Sarah Pierce
09-06-2013


Lo escuchas todo el tiempo de los emprendedores famosos: Mucho antes de dirigir empresas multimillonarias, ‘calentaban’ sus habilidades de emprendedurismo vendiendo limonadas en la esquina o construyendo gadgets en el garaje. Pareciera que todo empresario exitoso creció sabiendo que había nacido para ser la cabeza de un negocio. 


¿Pero qué es lo que diferencia a un emprendedor de los demás? ¿Qué es lo que hace que algunas personas crean en sí mismas lo suficiente como para superar fracasos y determinarse a llegar a la cima? Se requiere de un tipo especial de persona para ejecutar una idea y manejar los altibajos de iniciar un negocio. 

El espíritu emprendedor también es un don que inspira a los demás a ser lo mejor que pueden ser. Te compartimos cinco claves que lo definen: 

Pasión
Probablemente nadie personifique mejor la palabra “pasión” que Richard Branson, fundador de la mega-marca Virgin. Parte de la pasión de Branson se encuentra en su apetito insaciable de iniciar empresas. Fundado en 1970, Virgin Group se ha expandido a más de 200 empresas, incluyendo sectores como música, editorial, teléfonos móviles, aerolíneas y viajes espaciales. “Los negocios son como los camiones. Siempre viene otro”, dijo en una ocasión. 

Parte del atractivo de Branson es que no sólo es un apasionado de los negocios, sino también tiene una increíble pasión por la vida. Branson es famoso por su actitud aventurera y tomadora de riesgos, lo que lo convierte en uno de los emprendedores más admirados por su habilidad de tener éxito en su vida personal y profesional. 

Positivismo
Jeff Bezos sabe el poder del pensamiento positivo. Viviendo bajo el ‘mantra’ de que “todo reto es una oportunidad”, Bezos creó la librería más grande del mundo a partir de una pequeña startup de garaje, a la cual llamó Amazon. 

Amazon.com fue lanzado en julio de 1995, y consiguió ventas de US$20,000 semanales en sólo dos meses. A finales de la década de 1990 explotó la burbuja puntocom y las acciones de Amazon cayeron de $100 a $6 dólares. Para añadirle sal a la herida, las críticas predecían que el lanzamiento del sitio Web de Barnes & Nobel terminaría con Amazon. En lugar de esconderse en el rincón, Bezos salió a batallar con optimismo y confianza, destacándole a la crítica los puntos positivos de su empresa.  

Bezos siguió expandiendo Amazon, que ahora vende de todo, desde libros hasta ropa y juguetes. Bezos asegura que a su esposa le encanta decir: “Si Jeff está infeliz, espera tres minutos”. Gracias al pensamiento positivo de Bezos, Amazon se convirtió en una empresa de US$5,700 millones. 

Adaptabilidad
La habilidad para adaptarse es una de las mejores cualidades que un emprendedor puede tener. Todo negocio exitoso debe estar dispuesto a mejorar y personalizar sus servicios, de manera que siempre otorgue a sus clientes lo que quieren. 

Los fundadores de Google, Larry Page y Sergey Brin, toman este concepto más allá, no sólo reaccionando al cambio, sino liderando el camino. Google continuamente lidera el internet con ideas innovadoras que permiten que las personas vean y hagan cosas de una manera que antes no era posible (como con Google Earth). Con su habilidad para siempre estar un paso adelante, no hay duda de por qué Google es una de las compañías más poderosas de internet. 

Liderazgo
Un buen líder es alguien con carisma, sentido de ética y deseo de construir integridad en una empresa –alguien que es entusiasta, orientado al equipo y un gran maestro. Todos estos atributos eran personificados por Mary Kay Ash, fundadora de Mary Kay Cosmetics, una empresa que ha ayudado a más de medio millón de mujeres a cumplir su sueño de tener un negocio. 

La historia de Ash inicia con una madre soltera que trabajaba en el área de ventas para una empresa de productos para el hogar.  A pesar de haber estado en el top de los mejores vendedores por 25 años, Ash constantemente observaba los ascensos de puesto y de sueldo injustos que sus colegas masculinos recibían. Cansada de la forma en que era tratada, Ash inició Mary Kay Inc. en 1963 con $5,000 dólares. 

Ash era conocida por ser una motivadora poderosa y una líder inspiradora, creando la empresa con una actitud de “¡Sí se puede!”. Sus incentivos incluían los famosos Cadillacs rosados, los cuales entregaba a sus directoras de ventas más destacadas. Gracias a su poderoso liderazgo, Ash fue nombrada como una de los 25 líderes de negocios más influyentes en los últimos 35 años, y su empresa ha sido reconocida como una de las mejores para trabajar en Estados Unidos. 

Ambición
A los 20 años Debbi Fiels no tenía gran cosa. Era una ama de casa joven sin experiencia en los negocios, pero lo que sí tenía era una excelente receta de galletas de chispas de chocolates y el sueño de compartirla con el mundo. 

Fields abrió su primera tienda Mrs. Fields en 1977, a pesar de que le dijeron que estaba loca como para creer que un negocio podía sobrevivir vendiendo únicamente galletas. La determinación de Fields  y su ambición la ayudaron a crecer su pequeña tienda de galletas a una empresa de US$250 millones, con más de 600 locaciones en Estados Unidos y otros 10 países.

viernes, 6 de septiembre de 2013

Liderazgo: Jobs vs. Zuckerberg





Conoce las principales diferencias y similitudes en el estilo de liderar de dos de los empresarios más exitosos del siglo 21.

Por John Patrick Pullen
05-22-2012







Se requiere de un tipo especial de persona –y de personalidad- para liderar una empresa, en particular una startup, y dirigirla hacia el éxito. Tomemos a Steve Jobs, co-fundador de Apple y a Mark Zuckerberg de Facebook como ejemplo. Cada uno inició una compañía de tecnología que no sólo ha dejado huella en el Silicon Valley, sino que crearon productos que cambiaron la vida de millones de personas.
¿Pero qué podemos decir acerca de Jobs y Zuckerberg como líderes? Zuckerberg consideraba a Jobs como un mentor, y Jobs, antes de su muerte, expresó en numerosas ocasiones su admiración por Zuckerberg. Ambos mostraron a lo largo de sus carreras tendencias similares como a guardar rencores –sólo una de las características personales y administrativas que los dos líderes compartían. Pero también fueron distintos en muchas otras cosas, algunas de las cuales podrían demostrar el cambio generacional en la manera en la que los directivos liderarán en el siglo 21.
A continuación analizaremos algunas de las similitudes y diferencias entre los estilos de liderazgo de Jobs y Zuckerberg:

Similitudes

Deseo de algo más que dinero
Es muy conocido el hecho de que Jobs ganaba un dólar al año, y que Zuckerberg ha prometido donar la mayor parte de su fortuna a la caridad.
Aunque su patrimonio equivalía a los tres mil millones de dólares en el momento de su muerte, Jobs, por encima de todo, intentaba crear productos de la más alta calidad. Y mientras se espera que el CEO de Facebook se haga increíblemente millonario con la incursión de su empresa en la Bolsa de Valores, su principal meta siempre ha sido conectar a la gente alrededor del mundo. Cuando Zuckerberg hizo pública su intención de registro ante la Bolsa de Valores, inicia su carta de 2,200 palabras diciendo: “Facebook no fue originalmente creado para ser una compañía. Fue construido para cumplir una misión social—hacer al mundo más abierto y conectado.”
Frialdad
Jobs no se disculpaba por su estilo brusco de dirigir. “Si algo apesta, se lo digo a la gente en su cara”, citado en la biografía elaborada por Isaacson. “Es mi trabajo ser honesto. Sé de lo que estoy hablando, y por lo general tengo la razón.”
Los empleados y ex empleados de Facebook han descrito a Zuckerberg como un robot, y en una entrevista con The New Yorker, él se llamó a sí mismo “raro”. En el lugar de trabajo, esto se puede traducir en ambos: frustración y grandes resultados en el hecho de que Zuckerberg no teme a tratar cosas nuevas, escribe el empleado de Facebook Andrew Bosworth, citado en un artículo del Wall Street Journal.
Estilo enérgico
En una historia bien documentada antes del lanzamiento del iPod, Jobs demandó que el dispositivo disminuyera su grueso. Los ingenieros decían que no había manera de reducir su tamaño, por lo que Jobs tomó el prototipo y lo tiró a una pecera llena de agua. Salieron burbujas del dispositivo, terminando así la conversación al demostrar el espacio vacío que aún tenía dentro.
Historias parecidas de las peticiones de Zuckerberg han salido a la luz, pero el ex empleado de Facebook Yishan Wong lo llamó exigente, “con un gran enfoque en hacer que Facebook logre su misión.” Zuckerberg tiene poca tolerancia hacia los sentimientos de los demás en el momento de alcanzar las metas para la empresa, dice Wong.

Diferencias

Fracaso vs. éxito desenfrenado
Antes de saltar a la ventaja en la guerra de la computación personal, a principios de la década de los 80, Apple perdió posicionamiento en el mercado y dirección por lo que terminó dimitiendo a Jobs como CEO. Fue su fracaso y su tiempo fuera de la compañía lo que le ayudaron a volver a posicionar Apple. Jobs desarrolló lo que se convirtió en OS X, la médula del éxito del software de la empresa, así como mejorar sus técnicas de negociación que permitieron que la compañía ganara miles de millones de dólares.
Por el otro lado, Zuckerberg, no ha fracasado en nada importante por lo que no ha demostrado su reacción a esta situación. Es raro, sino que imposible, para un innovador triunfar en todo lo que hace, todo el tiempo, y su mayor récord es dejar a algunos inversionistas con desconfianza debido al alto precio de las acciones de Facebook.
Productos vs. personas
En términos de ingresos, Apple es sobre todo una empresa de hardware. Esto se debe a que Jobs tenía una idea de que el “producto va primero” y resolvía problemas que los consumidores ni siquiera sabían que tenían. Los dispositivos y software de Apple son por lo general tan refinados que los usuarios no se tienen que molestar en leer los manuales de uso.   
Facebook, tiene una ideología de que “la gente va primero”, por lo que constantemente agrega funciones y servicios que mantienen a los usuarios interconectados de múltiples maneras. Esta cultura, a la que Facebook llama “The Hacker Way” en su carta de registro a la BV, puede facilitar ricas experiencias, pero también puede causar que la usabilidad sufra cuando las nuevas funciones son muy avanzadas para que la gente se adapte.  
Privacidad vs. apertura
Antes de la publicación de la biografía de Steve Jobs el otoño pasado, gran parte de la vida personal de Jobs era un misterio –casi tan secreta como los productos que aún no se han lanzado al mercado. Mientras gran parte de su vida ha sido develada, es importante recordar que Jobs decidió cooperar en la producción del libro sólo después de que fuera claro de que estaba muriendo.
Zuckerberg ha sido más abierto con su vida personal. Esto es un reflejo de la era de saturación de medios en la que opera, así como de la misma naturaleza de su negocio. Mientras su perfil es privado, periódicamente publica posts y comunica detalles de su vida personal, mientras que públicamente difunde donar gran parte de su fortuna a la caridad.

Por qué funcionaba el liderazgo de Steve Jobs

El co-fundador de Apple era un jefe difícil, pero su visión de “pensar diferente” le permitió crear productos increíbles que reflejaban su identidad.


Por Adam Toren
08-28-2013












Steve Jobs era un jefe duro, sin duda. Y aunque la primera cinta biográfica basada en la vida del co-fundador de Apple no escatima en mostrar su estilo agresivo de liderazgo, no reúne toda la historia. En la película despide a  un ingeniero con un movimiento de muñeca y luego le pregunta “¿Qué sigues haciendo aquí?”. Pero a pesar de que era estricto, impulsaba un ambiente colaborativo en el que pudiera surgir la innovación. 

Después de ver “Jobs” me quedé pensando sobre qué hacía especial a suestilo de liderazgo y los obstáculos de personalidad que toca la película. Aunque recomiendo esperar por la interpretación de Aaron Sorkin de la vida de Steve Jobs (la segunda película biográfica de Jobs, y para la que Steve Wozniak está consultando) “Jobs” me hizo pensar por qué la monarquía colaborativa de Steve Jobs fue tan exitosa. Aquí cuatro razones: 

Su visión ayudaba a impulsar la creatividad individual
Apple y Steve Jobs son inseparables. Su identidad estará reflejada en cada producto Apple que se desarrolle, y eso se debe a que se involucraba en todos los elementos de la filosofía de diseño de Apple. Era conocido por ser muy controlador, y de hecho se ha relatado que rediseñó la apariencia del camión y de la cafetería de la empresa. 

Aunque cada producto Apple es la suma de muchas habilidades distintas, éstos se adhieren a la visión establecida por Jobs de entender lo que hace a un producto Apple atractivo. Esta fundación específica empodera a los diferentes aspectos del diseño del producto a superarse, mientras que se mantiene consistente la experiencia del usuario. 

No contrataba a personas tontas
Los métodos de reclutamiento de Apple estaban estructurados alrededor de trabajadores especialistas y profesiones multifacéticas. Y aunque el primer instinto de muchos managers es contratar a alguien que trabaje igual o menos que el empleador, Apple buscaba a las personas talentosas de cualquier profesión y les daba una oportunidad de brillar. Estos empleados debían acordar con el mensaje básico de Apple. Y es de ahí de donde Jobs tomó su reputación de hombre duro. 

Llevó una filosofía de artista a la tecnología
El artista sabe por qué su arte es increíble, pero al final se trata de que el consumidor lo note. El iPad les enseñó a los consumidores que las baterías de una laptop no tenían que calentarse en su regazo. Esto podría haber sido un pitch difícil en un focus group, pero Apple no los necesitaba. La voluntad de Jobs de invertir en la estética de los productos Apple modeló el propósito utilitario de todo dispositivo electrónico en algo que era emocionante y se vendía a sí mismo por ser maravilloso. 

Desdeñó el estatus quo
Alerta de spoiler: La cinta “Jobs” termina con una re imaginación de la grabación del icónico anuncio de Apple para el Super Bowl de 1997. La campaña “Think Different” no sólo se convirtió en el mantra que mejor describía la filosofía de Apple, sino que también representaba el lado humano olvidado de la tecnología. 

Un teclado táctil de Apple, creo, personifica el verdadero significado de “Piensa diferente”. Se siente natural, rápido y regresar al teclado de PC sería incómodo. Los productos Apple son más caros porque pagas por un equipo de diseño que ha tenido la libertad de analizar cómo interactúas con el producto. Steve Jobs no sólo es conocido por su voluntad de compartir el crédito, sino por hacer que la gente reconozca que buena parte de lo que hace a los productos Apple increíbles es la fe que la empresa pone en las manos de su equipo de diseño. 

Aunque Jobs probablemente no sabía cuándo grabó su primera voz en off, estaba construyendo la fundación de un culto de personalidad que explotó simplemente porque sus productos eran más agradables que los de los demás. 

Debe resaltarse que Steve Jobs fue el contrapunto de un movimiento que ya estaba en marcha. Las computadoras eran inevitables, pero Jobs fue el único dispuesto a entrar a la industria desde un ángulo novedoso. 

Su estilo de management provocaba desencuentros, pero los resultados son claros: Dejar que tus productos reflejen a las mentes que los crearon afectará en cómo los clientes se sentirán cuando lo compren. Steve Jobs era un bully ocasional, pero porque estaba consciente de la relación entre el producto y su identidad. Espera lo mejor de tus colaboradores, espera lo mejor de ti mismo y siempre considera nuevas formas para que tu empresa “Piense diferente”.

10 lecciones de Jeff Bezos para emprendedores

El fundador de Amazon revolucionó la industria del e-commerce y es uno de los empresarios más influyentes del mundo.

Por Belén Gómez-Pereira
09-04-2013






Jeff Bezos, el “rey del retail online”, es uno de los emprendedores e inversionistas más influyentes de nuestros tiempos. El fundador de Amazon recientemente adquirió el emblemático diario The Washington Post y es uno de los hombres más ricos del planeta, con una fortuna calculada en US$25,000 millones, colocándolo en el puesto #19 del listado de la revista Forbes.

Te presentamos 10 aspectos clave en su éxito:

1. Renuncia a la seguridad y atrévete. Hacia 1994, Jeff Bezos –antes de cumplir 30 años- podía considerarse exitoso al ser el  vicepresidente más joven de una importante firma de inversiones en Wall Street. Bezos recibía un sueldo de seis cifras en dólares, pero estaba decidido a seguir su sueño de crear una empresa en el entonces novedoso mundo del comercio electrónico. Fue una decisión arriesgada, pero al poco tiempo generaba US$610 millones de ventas anuales y tenía 13 millones de clientes en el mundo.   

2. Identifica oportunidades. Buena parte de lo que hace a un emprendedor sobresaliente es su capacidad de identificar oportunidades en el mercado, pero sobre todo de aprovecharlas. Mientras trabajaba para D.E. Shaw & Co. investigaba sobre el crecimiento de internet, notando que éste era de 2,300 por ciento al mes. Para Bezos fue claro: internet sería el medio del futuro y a través de él podría vender productos a un costo mucho menor. 

3. Prueba, lanza rápido y expándete. Cuando Bezos decidió vender en internet, tenía una selección de 20 productos posibles, entre CDs, libros y software. Al final optó por los libros debido a que existían millones de títulos y tendría una gran ventaja competitiva frente a las librerías fijas donde, cuando mucho, podían almacenar un par de cientos. Así, en 1995 abrió “la librería más grande del mundo” (Cadabra.com, que después rebautizó como Amazon) que lo hizo famoso. A partir de 1998, después de comprobar el éxito en la venta de libros, empezó a vender otros productos (primero regalos de Navidad). Al poco tiempo se diversificó y hoy Amazon prácticamente vende de todo desde libros hasta ropa, juguetes y electrónica. 

4. Primero el cliente. La base de la filosofía de Amazon se encuentra en este argumento. Bezos dice: “nuestra visión es ser la empresa más centrada en el consumidor del mundo, donde éste puede encontrar todo lo que quiera online”. Esta ideología se muestra desde en su sitio Web fácil de navegar y alimentado con los comentarios y calificaciones de los usuarios; hasta en la política de envíos que es sumamente eficiente (aun cuando la compra se realice fuera de Estados Unidos). 

5. Siempre innova. Para cuando surgió Amazon, el retailer online era prácticamente una innovación. Muy pocas empresas vendían en internet y ninguna con esa capacidad. La innovación ha sido siempre parte de su carrera empresarial; desde el desarrollo del sitio, la venta de toda clase de productos en un mismo sitio y el excelente servicio que ofrece al usuario al comprar en Amazon. Es esta cultura la que le ha permitido adelantarse a su competencia, a tal grado de prácticamente eliminarla (el sitio de Barnes & Noble es su ‘mayor competidor’, aunque concentra menos del 10 por ciento del mercado). 

6. Sé paciente. Es otro de los ‘mantras’ empresariales de Bezos. Como emprendedor trabajador, sabe que los grandes resultados se ven con el tiempo, no son inmediatos. Nada surge de la noche a la mañana. De hecho, en las primeras etapas de Amazon, Bezos tuvo que pedir un préstamo a su familia y amigos para mudarse a Seattle e inició la compañía desde su garaje. 

7. Trabaja en equipo. Bezos ha afirmado en varias ocasiones que parte del éxito de Amazon se lo debe al esfuerzo, trabajo y la colaboración en equipo. Para el empresario, no existe cosa tal como “un genio solitario que sabe todo y tiene la fórmula mágica”, sino que es con un equipo capaz de personas que se estudia, debate, se generan ideas y soluciones para resolver las necesidades de los clientes. 

8. Diversifícate. Aunque al mundo entero llamó la atención la compra de Bezos del emblemático The Washington Post por US$250 millones, el emprendedor aseguró que se conservará el espíritu informativo del diario, pero con la filosofía de Amazon: centrándose en el cliente (en este caso, en los lectores). Además, Bezos es inversionista de varias empresas y startups, como Uber y Business Insider, ha invertido en tecnología aeroespacial, robótica y en la ciencia (con su empresa Bezos Expeditions).

9. Ten pensamiento positivo. Bezos vive con la idea de que “cada reto es una oportunidad”. A pesar de que Amazon nació como una pequeña startup de garaje, pronto se convirtió en la librería más grande del mundo. Cuando explotó la burbuja puntocom, y las acciones de Amazon pasaron de $100 a $6 dólares (mientras que su competidor el sitio de Barnes & Noble se alzaba) Bezos no se escondió sino que salió a la batalla con confianza y optimismo, destacando los aspectos positivos de su empresa. La esposa de Bezos dice “Si Jeff no está infeliz, sólo espera tres minutos”. 

10. Sigue tu pasión. Sin duda lo que hace a un emprendedor grande es la pasión por su trabajo. Y Bezos ha sido apasionado de todo lo que Amazon significa: de los libros (su título favorito es The Remains of the Day de Kazuo Ishiguro), del e-commerce y del liderazgo que conlleva dirigir una empresa. Además tiene un buen nivel de confianza en sí mismo y es unorador poderoso y convincente.

5 reglas de los negocios exitosos según Branson.


Aunque el panorama emprendedor ha cambiado, el CEO de Virgin asegura que los principios que hacen a una empresa buena son los mismos.

Por Richard Branson
09-02-2013








Durante una reciente entrevista en radio en la BBC, el presentador me peguntó qué consejo les daría a las personas jóvenes que recién inician un negocio. En los 46 años que han pasado desde que lancé la Student magazine, el mundo ha cambiado. La incertidumbre económica y el ritmo acelerado de los avances tecnológicos hacen que replicar el éxito de Virgin hoy sea más retador para los emprendedores. 

En la Student magazine expresamos nuestra oposición a la Guerra de Vietnam y a la Guerra Fría; en estos tiempos, los gobiernos enfrentan grandes amenazas en cuanto a terrorismo e inestabilidad en el Medio Oriente y África. En aquel entonces, los mercados europeos y estadounidenses estaban estables; hoy, el poder económico de las naciones occidentales está siendo retado por las crecientes economías de Brasil, China, Rusia e India, y las oportunidades de crecimiento y de nuevos mercados se encuentran en todo el mundo. 

A la par está la nueva habilidad de los marketers de ir más allá de los canales tradicionales (la televisión, el radio y los periódicos) para construir una base de seguidores online a través de TwitterGoogle+ y Facebook, usando aplicaciones como Klout. Esto significa que las startups pueden lanzarse con presupuestos de marketing mucho menores y que los emprendedores pueden introducirse en mercados más rápidamente. También significa que las compañías exitosas deben defender sus posiciones, ya que sus productos pueden quedar obsoletos. 

Pero durante la entrevista en radio, argumentaba que aunque el mundo está cambiando rápidamente, los pasos para construir un negocio exitoso permanecen iguales. Las cinco simples guías que seguimos cuando iniciamos la revista y después Virgin Music, continúan siendo válidas y útiles  como lo eran a finales de la década de 1960: 

1. Si no lo disfrutas, no lo hagas. Debes amar lo que haces. 

2. Sé innovador. Crea algo diferente y destacarás. 

3. Tus empleados son tu mejor activo. Los empleados felices crean clientes felices. 

4. Lidera escuchando. Obtén retroalimentación de tu equipo y de tus clientes regularmente. 

5. Sé visible. Promueve tu empresa y su oferta poniéndote frente a las cámaras.

Virgin Media fundó su programa Pioneers para promover a los aspirantes a emprendedores y ayudarlos a hacer networking. Uno de nuestros pioneros más conocidos es James Edwards, fundador de SB.TV, un canal online de música y estilo de vida, cuya empresa y modelo de negocios me recuerdan a Virgin en sus primeras etapas. 

Cuando Edwards inició, su empresa eran sólo él y su cámara; empezó publicando videos de presentaciones de rap para sus seguidores online. Estaba haciendo lo que amaba, y pronto desarrolló un culto de seguidores en torno a sus videos innovadores de eventos musicales. 

Una vez que estableció su marca y una base de seguidores, Edwards y su equipo extendieron el alcance de SB. TV a más áreas, incluyendo estilo de vida, ropa y hasta un sello discográfico. Marcas tradicionales como Puma empezaron a llamarle, queriendo discutir con él tratos y alianzas. 

Edwards también ha forjado su propia suerte identificando talento. En 2010, un canta autor envió un video a SB.TV que fue aceptado y colocado en el canal de YouTube de la empresa. Las vistas empezaron a crecer, y eventualmente el rapero Example le ofreció al joven cantante la oportunidad de irse de gira con él. Éste era Ed Sheeran, cuya carrera fue efectivamente lanzada por SB.TV. 

Edwards se mantiene muy ocupado y visible, promoviendo a SB.TV y a sí mismo cuando puede –en su sitio Web, en alianza con Google Chrome y en los medios, donde cuenta la historia de su empresa, así como sus sueños y éxitos. Él sabe que un buen negocio depende de apoyar a tu gente y de ser un excelente oyente. A pesar de sus éxitos tempranos, mantiene los pies en la tierra y constantemente intenta nuevos emprendimientos. 

Si tienes una idea buena y la ejecutas correctamente, no importa cuándo lances tu startup. Aunque el ecosistema de negocios ha cambiado, las reglas básicas siguen siendo las mismas. En lugar de ponerte nostálgico por cómo solían ser las cosas, adopta nuevas oportunidades y retos que hoy están disponibles para ti.

EMPRENDEDOR.

Los emprendedores son un grupo curioso: Vienen en todos los tamaños, formas, géneros y personalidades. Muchas veces se despiertan al amanecer, pero generalmente son los últimos en abandonar la oficina. Usan aplicaciones para ser más productivos, interactúan con toda clase de gente y son extremadamente curiosos. 


Cuando un emprendedor es realmente bueno, también hace que los demás nos preguntemos si vale la pena madrugar y nos motiva a hacerlo. La reconocida empresaria, inversionista y personalidad mediática Ingrid Vandervelt, los define de esta manera: “Los emprendedores son rompedores de barreras cuya visión optimista del mundo, combinada con el pensamiento creativo, les permite enfrentar los mayores retos”. 

¿Suena demasiado loco? Bueno, en realidad ésa es la intención. Más allá de lo que hace un emprendedor existe una mentalidad que los hace creer que hasta lo que parece imposible es posible; más allá de las listas de pendientes, hay una forma de pensar que funciona como motor para actuar en contra del mundo. 

Si piensas de esta manera, las posibilidades de que triunfes haciendo lo que quieres son muchas. Por eso, te compartimos cinco formas de pensar que son comunes en los grandes emprendedores, ¿las tienes?:

1. Te gusta sentirte como un niño
Los emprendedores tienden a actuar como los niños en una juguetería. Nada está fuera de su alcance y su curiosidad es contagiosa. 

Cuando le pedí a la CEO de Guide, Leslie Bradshaw, que me explicara por qué prefería la mentalidad emprendedora en su vida, me respondió: “Conservo mi asombro infantil vivo. Me acerco al mundo con curiosidad, pasión, riesgo, tolerancia y fe –exactamente igual a como lo hacía cuando era niña. Las empresas más tradicionales para las que trabajé cuando salí de la universidad no adoptaban esta ideología, de hecho la desmotivaban”. 

2. Te gusta pensar (o sabes) que puedes hacerlo mejor
La innovación presupone que todo puede mejorarse. Para los emprendedores, esta suposición es la fuerza motriz detrás de sus esfuerzos. 

Jeremy Johnson, emprendedor y fundador de 2U, dice: “El tren de pensamiento de un emprendedor va así: ‘todo lo que me rodea fue inventado por alguien, y esa persona probablemente no sea más inteligente que yo’. Creemos que casi todo se puede mejorar de alguna manera. Empezamos a imaginar qué podría haber en lugar de lo que existe… el mundo es maleable y la mayoría de las reglas en realidad son guías a seguir”. 

3. Eres típicamente optimista
Esto podría ser algo extremadamente obvio como para destacarlo, pero su importancia no se debe subestimar. Existen muchos emprendedores que tienen una predisposición negativa; pero podría afirmar que los que piensan de esta manera generalmente no llegan muy lejos. Dos cosas tienden a ocurrir: 1) se ganan reputaciones de pésimos jefes y líderes 2) sus negocios eventualmente fracasan debido a su profecía de auto fracaso. 

Nota: Ser optimista es una mejor manera de mirar el mundo, así que hazlo por tu propio bien. 

4. Te gusta romper reglas
Los emprendedores son naturalmente rompedores de reglas e inconformistas. Ésta es una actitud y una mentalidad. Meredith Fineman, CEP de FinePoint Digital PR, presenta un vistazo a lo que pasa por la mente de un emprendedor regularmente: “Se me dificulta relacionarme con las personas que esperan que termine la semana o dejar la oficina para ir a la Hora Feliz. Mi trabajo nunca se termina, ni quiero que termine. Eso no significa que nunca hago cosas sólo por placer, pero estoy construyendo mi propia vida y no estrechándola según las ideas y estándares de alguien más”. 

5. Te adelantas a tu tiempo
Este último punto se acentúa en la época moderna, donde la tecnología es esencial para innovar. Como Vandervelt observa: “La tecnología ha sido el común denominador de todas las empresas que he empezado, desde la obtención de datos hasta las energías verdes. Creo que es un ecualizador y facilitador. Los emprendedores jóvenes y las startups necesitan enfocarse en escalar su empresa, entregar mejores y más rápidos resultados, y maximizar la productividad de su fuerza laboral. Todo esto puede apoyarse con la tecnología”. 

Ya sea que estés considerando mojarte los pies como emprendedor primerizo o ya te encuentres en el camino, debes tener en mente que lo que piensas es tan importante como lo que haces. Pensar como emprendedor requiere una percepción única del mundo y una mentalidad que ayude a ver el mundo como posibilidades ilimitadas para mejorar y cambiar.